Por qué un reclamo es una oportunidad.

Tomar un reclamo como algo personal y enojarse no es muy buena opción, a lo único que se llegará es a que ambas partes terminen enojadas, donde la parte más influyente siempre será el cliente. 
¿Por qué es influyente? Un cliente no muy contento le puede comentar a sus amigos, y sus amigos a sus amigos, y así ir multiplicándose la cantidad de personas y aumentando exponencialmente la imagen negativa de su marca. Lo que es peor, esta mala reputación puede llegar a oídos de alguien que tal vez en unos días tenga el potencial de ser su gran cliente del año. 
Ser capaz de escuchar es un don que pocas empresas tienen hoy en día, y diríamos que un don clave teniendo en cuenta el poder de difusión y viralización de las redes sociales. Hoy, a una empresa la modelan sus clientes. Son ellos los que deciden el futuro y las tendencias de consumo, los que deciden el futuro de su organización.
Sí, nadie es perfecto. Pero siempre podemos ser mejores. Si se poseen los canales de comunicación para atender los reclamos, hay que sacarles el mayor provecho posible e interesarse si entra uno nuevo ya que tal vez será la oportunidad de divisar un punto débil en su empresa, un punto que tal vez de no reforzarse a tiempo conlleve a un resultado peor que un mal comentario flotando en Internet.
Piénselo.




El equipo de tuQuejaSuma.